Permiso para Trabajar en Alturas

Los trabajos o actividades que se realizan a una altura superior de dos metros, donde además se necesitan ciertos elementos para apoyarlo, es considerado “de altura”, esta descripción es importante porque nos hace referencia a las características específicas y los riesgos que pueden tenerse.

Este tipo de actividades por lo general son de mantenimiento, limpieza, rehabilitación de estructuras y reparaciones existentes o nuevas, entre otras, para ellas se necesita de permisos y controles de riesgo fundamentales que avalen el trabajo, veamos a que se refiere.

¿Cómo sacar los permisos para trabajo en alturas?

El empleador o contratante debe efectuar un procedimiento para los permisos de trabajo, antes de iniciar la actividad en alturas, tomando en cuenta:

Permiso para trabajar en alturas
  1. Llenar el formato de permiso de trabajo.
  2. Debe contener los datos del trabajador, tipo de trabajo, altura aproximada, fecha de inicio y culminación, afiliación a la seguridad social, descripción y procedimiento del trabajo, medidas de prevención, equipos y sistemas para realizar el trabajo, constancia de capacitación de competencia laboral, ente otros.
  3. Debe incluir las observaciones que correspondan y los respectivos nombres y apellidos, firmas, clase de documento y números de identificación de los trabajadores.
  4. De igual forma, el nombre, apellido y firma de la persona que autoriza el trabajo.
  5. Finalmente, el nombre y firma del responsable de activar el plan de emergencias y del coordinador de trabajos en alturas (si es diferente de la persona que autoriza el trabajo).

Es fundamental tener en cuenta todas las medidas que garanticen seguridad en el trabajo frente a elementos de protección necesarios, acordes con el nivel de riesgo.

  • Los trabajadores que ingresen a una zona de peligro, deben contar con la debida autorización.
  • Si el trabajo requiere exponerse a caídas, debe contar con un aval o permiso de trabajo en alturas acompañado de la lista de chequeo respectiva de control, demarcación y demás especificaciones.

Lo anterior debe verse expresado en un formato de análisis de peligros por actividad (ARO, ATS, o cualquier otra metodología) para cumplir con la normativa legal.